«Acabo de mudarme a un estudio más grande y he disfrutado mucho explorando mi nuevo barrio con la bicicleta Brompton Bear Grylls», nos cuenta esta ceramista de 29 años residente en Los Ángeles.
«En realidad, es una zona estupenda para montar en bicicleta, así que enseguida he encontrado mis nuevas bodegas y parques favoritos».
Hace poco que Daniel ha dejado atrás el garaje para un solo coche donde empezó con su negocio de cerámica, Danny D's Mudshop. La demanda de sus piezas moldeadas y pintadas a mano, inspiradas en las hojas de tatuajes rápidos y las obras de arte «vintage» del Oeste americano, es enorme: se ha internacionalizado en un corto espacio de tiempo. Todo el mundo quiere tener sus productos en sus estantes, desde las famosas tiendas dedicadas al estilo de vida de Goodhood y Earl Of East de Londres hasta la sensacional Zombie Shop de Taiwán.
Su Brompton no solo le ayuda a conocer su nuevo entorno de trabajo y a gestionar su mayor carga de trabajo, sino que también le permite aprovechar al máximo sus merecidas aventuras el fin de semana.
«La BG es muy capaz, manejable y funcional», afirma. «Es ideal para desplazarme por la ciudad; he usado la bolsa delantera para transportar pequeñas piezas de cerámica y hacerme con suministros. Sin embargo, también se adapta a mi forma de viajar. Salgo mucho de acampada y al ser plegable puedo guardarla fácilmente en la camioneta o en la tienda, donde cada centímetro cuenta».
En última instancia, como me paso el día rodeado de ruedas giratorias, ¿quién mejor que yo para juzgar uno de los aspectos más característicos de Brompton?
«La velocidad que la Brompton BG puede alcanzar con sus pequeñas ruedas me sorprende mucho», afirma Daniel. «A mis amigos les encanta. Especialmente a mi ayudante en el estudio. Es un gran ciclista y admira el estilo y la funcionalidad».
